¿Cuáles son los tipos de empresa en España?

Según datos del Gobierno, en enero de 2024 había 2.922.920 empresas operando en España. De ellas, 2.917.389 eran PYMEs. Seguramente sepas lo que es una PYME, pero… ¿conoces todos los tipos empresa que existen en España y sus ventajas? ¿Tienes claro cuál se ajustaría mejor a tu idea de empresa?

Ya sea porque estás considerando crear tu propia empresa, ya tienes una o sencillamente te estás informando al respecto, a lo largo de este artículo podrás hacer una buena panorámica en tu cabeza de los distintos tipos de empresa en base a su forma jurídica, tamaño, esquema laboral y mucho más.

Tipos de Empresa en base a su Forma Jurídica

El principal aspecto a tener en cuenta a la hora de analizar el tipo de una empresa es su forma jurídica. La forma jurídica de una empresa es la modalidad legal mediante la cual va a operar a ojos de la administración. De ella dependerán:

1. La estructura de la empresa
2. La afiliación a la Seguridad Social
3. Las obligaciones fiscales y contables
4. La responsabilidad frente a terceros
5. La inversión mínima inicial de capital

Pese a que en España existen cerca de 20 formas jurídicas distintas para empresas, muchas de ellas responden a realidades económicas muy específicas, como en el caso de las Sociedades Anónimas Deportivas.

Para ponernos en situación y empezar a orientarnos podemos utilizar la herramienta del Ministerio de Industria y Turismo, sin embargo la herramienta no nos ofrece apenas información sobre las ventajas y desventajas de cada forma jurídica.

Por ello, vamos a repasar toda la información necesaria para comprender las diferencias entre los tipos de empresa más populares en España:

Empresario individual o Autónomo

Dentro de la regulación española, la figura del autónomo es la figura empresarial más sencilla y básica. El empresario autónomo es el responsable absoluto a nivel legal y financiero. Esta forma jurídica es perfecta para negocios unipersonales.

• Ventajas de la figura de Autónomo
  • Libertad total para la toma de decisiones al no haber socios
  • Coste de constitución y gestiones mínimo
• Desventajas de la figura de Autónomo
  • No existe separación entre el patrimonio de la empresa y el del empresario, con lo que cualquier problema económico en la empresa repercutirá directamente al patrimonio personal
  • Deberás pagar la cuota de autónomos aunque ese mes no tengas encargos

Sociedad de responsabilidad Limitada (S.L.)

Es el tipo de empresa más habitual en España. El número mínimo de socios es de uno, con lo que puede ser una empresa unipersonal. Hasta 2022 se requería un capital social mínimo de 3.000€, pero gracias a la Ley Crea y Crece este capital se ha reducido a 1€.

El capital de las SL se divide en participaciones sociales, las cuales son acumulables e indivisibles, conformadas a partir de las aportaciones de todos los socios.

Es el tipo de empresa perfecto para pequeñas empresas con socios estables e implicados.

• Ventajas de las Sociedades Limitadas (S.L.)
  • Régimen jurídico muy flexible, pudiendo aportar al capital mediante bienes o dinero
  • A partir de los 40.000€ de beneficios los impuestos son inferiores a los que debe pagar el autónomo
  • Puedes desgravar tu propio sueldo como gastos de la empresa
  • Los socios no tienen que responder personalmente con su patrimonio ante las deudas de la empresa
• Desventajas de las Sociedades Limitadas (S.L.)
  • No puedes transferir las participaciones de forma sencilla, con lo que será difícil atraer un gran número de inversores
  • Los trámites de constitución son mucho más largos que los del alta de autónomo
  • Si pedimos financiación a un banco, este nos exigirá garantías personales, con lo que la responsabilidad limitada no será tal

Sociedad Anónima (S.A.)

Las sociedades anónimas son la forma jurídica preferida de las grandes empresas en España, y siguen de cerca a las S.L. en cuanto a popularidad en España. Al igual que las S.L., requerirán un mínimo de un socio, pero también un capital social inicial de 60.000€.

Las S.A. tienen habitualmente dos órganos sociales: por un lado el Administrador, y por otro lado la Junta de Accionistas. El primero se encarga de la gestión de la empresa y el segundo de representar ante el mismo los intereses de los inversores.

• Ventajas de las Sociedades Anónimas (S.A.)
  • Los socios pueden vender libremente sus acciones y la SA puede cotizarlas en Bolsa
  • Los socios accionistas tienen una responsabilidad limitada
  • El número de socios puede variar
  • Los socios no tienen que responder personalmente con su patrimonio ante las deudas de la empresa
  • Puede ser unipersonal, en cuyo caso se denominan S.A.U.
• Desventajas de las Sociedades Anónimas (S.A.)
  • Al ser una forma jurídica diseñada para grandes empresas, el capital inicial mínimo deberá ser de 60.101,21€
  • Mucho más rígida a nivel operativo debido a una mayor supervisión del Estado
  • Salvo excepciones, las SA están sometidas a una mayor carga impositiva

Sociedad Colectiva (S.C.)

La Sociedad Colectiva es un tipo de empresa basado en la plena confianza entre los asociados. No requiere de una aportación de capital mínimo, pues su capital será el de todos los asociados, y la empresa siempre estará denominada en base al nombre de uno o todos sus socios, añadiéndole después las siglas S.C.

Requiere de un mínimo de dos socios y no existe máximo para el número de los mismos, pero estos se dividirán entre socios capitalistas (que aportan bienes, trabajo y/o capital) y socios industriales (que únicamente aportan trabajo).

• Ventajas de las Sociedades Colectivas (S.C.)
  • Existe una mayor motivación entre los socios ya que todos participan directamente de los beneficios
  • Se puede reunir un capital mayor al tratarse del patrimonio personal de todos los socios
  • Salvo que se haya pactado lo contrario, todos los socios tienen derecho a voto
• Desventajas de las Sociedades Colectivas (S.C.)
  • La responsabilidad ilimitada de los socios, aunque se puede ser limitada en algunos casos
  • La S.C. se disuelve si uno de sus socios fallece
  • Es difícil echar a un socio de la S.C.
  • En general, la enorme co-dependencia de los socios

Sociedad Comanditaria

Las Sociedades Comanditarias (o sociedad en comandita) están pensadas para aquellas personas que quieren invertir en una empresa sin tener que encargarse de la gestión.

Se componen de dos tipos de socio: los comanditados y los comanditarios. Los comanditados tienen responsabilidad ilimitada y se encargan de la gestión, mientras que los comanditarios únicamente hacen una aportación de capital.

• Ventajas de las Sociedades Comanditarias
  • Libertad total a la hora de aportar al capital social
  • Más facilidades a la entrada de capital, ya que pueden unirse socios sin interferir en la gestión
  • Mayor independencia por parte de los socios comanditados, que no tienen que operar en base al criterio de los comanditarios
• Desventajas de las Sociedades Comanditarias
  • Los socios comanditarios no pueden votar ni participar de la administración
  • Los socios comanditados tienen responsabilidad ilimitada
  • Se tributa a través del Impuesto de Sociedades, progresivo y más elevado que el de otras formas jurídicas

Sociedad Cooperativa

Las sociedades cooperativas son el tipo de empresa en el que los socios comparten la propiedad y gestión de la misma.

Habitualmente se componen de socios comunes (también conocidos como socios de pleno derecho, usuarios o cooperadores) son aquellos que llevan a cabo la actividad principal de la empresa y aportan su capital.

Sin embargo, para permitir una mayor flexibilidad, la legislación española contempla la existencia de otros tipos de socios en las cooperativas, entre dichas figuras destacan los socios de trabajo, que solo participan con trabajo; o los socios adheridos, que solo participan con capital.

• Ventajas de las Sociedades Cooperativas
  • Responsabilidad limitada de los socios
  • Múltiples subvenciones y bonificaciones fiscales
  • Todos los socios tienen voz y voto al margen de su aportación de capital
  • Las administraciones priorizan la subcontratación de actividades públicas a cooperativas
• Desventajas de las Sociedades Cooperativas
  • Puede ser difícil llegar a acuerdos debido al alto grado de democratización
  • Hay un límite legal a la contratación de trabajadores no asociados
  • Las entidades financieras consideran a las cooperativas entidades de riesgo, con lo que les ofrecen tipos de interés más altos
  • Las administraciones no subcontratan a cooperativas hasta que no tienen una experiencia y recorrido contrastados

Otras formas de definir los distintos tipos de empresa

La forma jurídica de una empresa nos da muchas pistas acerca del tipo de empresa en cuestión, pero existen muchos otros indicadores a la hora de analizar las cualidades más importantes de los distintos tipos de empresa dentro del mercado. Los indicadores más populares suelen ser los siguientes:

Tamaño

La Unión Europea y la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) recomiendan analizar el tamaño de las empresas en función de los siguientes indicadores, basándose en el número de trabajadores y volumen de facturación anual:

1. Microempresa: Aquellas empresas con 10 trabajadores o menos y una facturación anual de menos de 2 millones de euros.
2. Pequeña Empresa: Se consideran pequeñas empresas aquellas que tengan entre 6 y 50 empleados, siempre y cuando su volumen de negocio anual sea inferior a los 10 millones de euros.
3. Mediana Empresa: Son las empresas más grandes que aún se consideran PYMEs (Pequeñas Y Medianas Empresas). Deben tener menos de 250 trabajadores y una facturación inferior a los 50 millones de euros anuales.
4. Gran Empresa: Las grandes empresas representan cerca del 1% del número de empresas totales en Europa y son las únicas que no se consideran PYME. Hablamos de una gran empresa cuando tienen más de 250 trabajadores en plantilla y factura más de 50 millones de euros al año.

Ámbito geográfico

Si no has vivido en una cueva durante el último siglo, con total seguridad has oído en alguna ocasión el término multinacional referido a una empresa. Conozcamos su significado exacto y las otras calificaciones en función del ámbito de actuación de las empresas.

1. Empresa local: Únicamente están presentes en un local concreto, un ejemplo típico sería un bar o una frutería.
2. Empresa regional: Aquellas empresas que operan en una o algunas regiones de un mismo país, como es el caso de ciertas cadenas de supermercados.
3. Empresa nacional: Otorgamos esta denominación a aquellas empresas que han conseguido expandirse a lo largo y ancho de todo un país pero aún no han dado el salto al extranjero.
4. Empresas multinacionales: Se consideran multinacionales a aquellas empresas que tienen filiales en distintos países pero su toma de decisiones está centralizada en un único país, habitualmente aquel en el que nació la empresa, como por ejemplo Inditex.
5. Empresas trasnacionales: Su ámbito de actuación es el mismo que el de las multinacionales, pero para adaptarse mejor a los distintos mercados han optado por descentralizar gran parte de su toma de decisiones, como por ejemplo en el caso de McDonalds.

Sector económico

Otra de las formas más habituales de analizar los distintos tipos de empresa es clasificarla en función de su situación en el proceso productivo.

1. Sector Primario: Es el encargado de la recolección y/o extracción de recursos naturales y materias primas, aunque en algunos casos realizan un leve procesamiento de las mismas. Es el caso de la ganadería, agricultura, minería.
2. Sector Secundario: También conocido como el sector industrial, es el encargado de transformar materias primas en bienes consumo y/o medios de producción. Engloba a los fabricantes de coches, móviles, ropa, maquinaria e incluso constructores de casas prefabricadas.
3. Sector terciario: Más conocido como sector servicios, engloba todos los servicios dirigidos a satisfacer las necesidades de la población, incluyendo el ocio o la distribución de los productos elaborados en los sectores primario y secundario. Podemos considerar como tal los cines, restaurantes, hospitales y farmacias.
4. Sector cuaternario: De acuñación reciente debido al crecimiento de este tipo de empresas, hablamos del sector cuaternario cuando hablamos de empresas centradas en la investigación y el desarrollo. Entre ellas podemos encontrar a empresas de investigación científica, análisis estadístico, tecnológicas o asesorías.

Es importante entender que los sectores no son compartimentos estancos, hay infinidad de empresas que participan de dos o incluso más sectores del proceso productivo.

Por ejemplo, Repsol extrae el petróleo (primario), lo convierte en gasolina (secundario), lo vende en sus gasolineras (terciario) e investiga nuevas fórmulas para mejorar todos los puntos anteriores (cuaternario).

¿Presencial, híbrido o remoto?

Gracias al desarrollo de la telefonía, internet y el equipamiento informático en general, en los últimos años se han creado las condiciones para que sea posible trabajar sin acudir a la oficina.

Estos avances, en combinación con los problemas del mercado inmobiliario, la distribución demográfica o la internacionalización de la economía han dado lugar a que para muchas personas sea realmente atractiva la idea de poder trabajar desde su domicilio.

Por ello, para muchos empleados está convirtiéndose en una realidad el analizar a las empresas en base a los siguientes criterios:

1. Presencial: El trabajador debe acudir a la oficina o puesto de trabajo para desempeñar sus labores.
2. Híbrido: El trabajador trabajará algunos días en la oficina y otros desde su domicilio o lugar de preferencia.
3. Remoto: El trabajador realizará todas sus labores desde su domicilio o lugar de preferencia.

Conclusión

Existen innumerables tipos de empresa en función del prisma desde el que escojamos analizarlo, y cada uno nos ofrecerá una información útil sobre en qué punto se encuentra una empresa dentro del complejo mapa económico en el que vivimos.

Si tu intención es abrir una empresa y sigues teniendo dudas sobre los distintos tipos de empresa, te recomendamos que acudas a una gestoría o consultes tus dudas con un abogado especializado en derecho mercantil, ya que -como has podido ver- existen muchos matices que pueden suponer una diferencia realmente significativa.

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