¿Cómo te afectan los tipos de interés del BCE?

Esta última semana, el mundo financiero ha prestado mucha atención a la decisión del BCE sobre el mantenimiento de los tipos de interés en el 4,25%, mientras que muchos analistas esperábamos que volvieran a subir.

Esto se debe a que, con los graves problemas de inflación que está viviendo la población europea (y mundial) en los últimos tres años, cobra una gran importancia cualquier decisión que haga el Banco Central Europeo (BCE) en relación a los tipos de interés.

Pero vayamos por partes: Qué se ha decidido, por qué y cómo te afecta son las tres preguntas que vamos a abordar en este artículo. Presta atención, porque todas las decisiones del BCE sobre los tipos de interés influyen mucho más de lo que creemos en nuestras decisiones financieras.

¿Qué son los tipos de interés y qué clases hay?

Podríamos referirnos a los tipos de interés como el mecanismo moderno para establecer el precio del dinero. Cuando solicitamos un préstamo, realizamos un depósito a largo plazo o abrimos una cuenta remunerada o de ahorro, el elemento al que tendemos a prestar más atención es el tipo de interés.

Actualmente, existen tres tipos de interés a nivel cualitativo:

• Tipo de interés variable: El valor de este tipo de interés se modifica en función de, valga la redundancia, variables externas. Está totalmente afectado por las subidas y bajadas del tipo de interés marcadas por el BCE.
• Tipo de interés fijo: Hasta que se amortice el préstamo, el valor de este tipo de interés se mantendrá constante de acuerdo a contrato, con lo que seremos inmunes a las decisiones que el BCE realice en relación al tipo de interés.
• Tipo de interés mixto: Una de las modalidades más populares en la actualidad, el tipo de interés mixto es un híbrido entre los dos anteriores, pues tendrá un interés fijo y otro marcado por los cambios del tipo de interés establecido por el BCE.

En el caso que nos ocupa, las tasa de interés marcadas por el BCE son las tasas que deberán pagar los bancos al Banco Central Europeo por obtener dinero prestado del mismo, tasas que, en cascada, repercutirán a toda la economía de la eurozona.

Cabe remarcar que muchos préstamos con un componente variable están atados al euríbor, que pese a ser confundido fácilmente con los tipos de interés del BCE, no es lo mismo. Eso sí: el euríbor está fuertemente influido por el tipo de interés del BCE.

¿Por qué sube o baja el BCE los tipos de interés?

Desde la creación del euro, el máximo responsable de a política monetaria en Europa es el BCE, cuyo objetivo vital es el mantenimiento de la estabilidad y prosperidad económica en la Unión Europea.

Como estrategia para conseguir sus objetivos, el BCE siempre intenta que el tipo de interés sea del 2%, pero modifica el mismo como respuesta a distintos eventos económicos para evitar los problemas de deflación, inflación o, todavía peor, hiperinflación.

¿Por qué sube el BCE los tipos de interés?

Cuando el BCE sube los tipos de interés, como ha venido haciendo en los últimos tres años, es para proteger la economía de la inflación. Consigue esto forzando a pagar más por los préstamos y, por tanto, desalentando la concesión de los mismos.

¿Por qué el BCE baja los tipos de interés?

Cuando el BCE baja los tipos de interés busca estimular la economía, fomentando que solicitar dinero sea más barato y, por tanto, sea más asequible devolverlo.

¿Cómo están los tipos de interés actualmente?

Debido a los últimos cambios del BCE, los indicadores del tipo de interés se encuentran actualmente en:

• Tipo de interés general: 4,25%
• Tipo de interés de la facilidad marginal de crédito: 4,50%
• Tipo de interés de la facilidad de depósito: 3,75%

¿Por qué el BCE ha decidido mantener los tipos de interés en el 4,25%?

Tras la trepidante subida desde el inicio de la Guerra en Ucrania, el pasado junio el BCE decidió por primera vez reducir 25 puntos básicos los tipos de interés, desde el 4,5% hasta el 4.25%.

Esta decisión fue considerada valiente (o temeraria, si el resultado es negativo debido al encarecimiento de las importaciones) teniendo en cuenta que la Reserva Federal -el homólogo estadounidense del BCE- no había tomado su decisión aún.

Sin embargo, todo apunta a que la Reserva Federal recortará también su tipo de interés el próximo septiembre, invirtiendo así la tendencia de seguidismo de un lado a otro del Atlántico.

Ahora, el mantenimiento del 4,25% lanza un mensaje: el tipo de interés no bajará tan rápido como subió, con lo que es difícil imaginar un escenario en el que la economía haya vuelto a la normalidad en el primer semestre de 2025.

¿Cuál es la tendencia esperada con el tipo de interés?

Ahora, las declaraciones de Lagarde y las predicciones de los expertos apuntan a que, en la próxima reunión del 12 de septiembre, es muy probable que los tipos de interés vuelvan a bajar.

Conviene matizar que la propia presidenta del BCE ha dejado claro que todas sus decisiones se realizan en base a la recolección de una gran muestra de datos, y que si esos datos apuntan a que la decisión de reducir (y ahora mantener) los tipos de interés fue errónea… volveremos a subir.